BARRERAS
PARA EL APRENDIZAJE
El concepto de «barreras
para el aprendizaje y la participación»
fue desarrollado por Booth y Ainscow (Ainscow, 1999; Booth, 2000; Booth y
Ainscow, 2002). Es un concepto nuclear en relación
con la forma en la que los profesores deben
enfocar su trabajo educativo con el alumnado en desventaja o más
vulnerable a los procesos de exclusión.
Las
barreras
pueden coexistir en tres dimensiones:
E En
el contexto escolar (valores, creencias y actitudes compartidas). En los procesos
de planificación,
coordinación
y funcionamiento del centro (proyectos educativos y curriculares, comisiones y
equipos, dirección
y consejo escolar, horarios, agrupamientos, distribución
de recursos, etc.
E En
el contexto áulico;
metodología
de enseñanza, tipo de
interdependencia entre los alumnos, prácticas
evaluadoras, recursos, etc.
E En
el contexto socio familiar.
Las
barreras para el aprendizaje y la participación
refieren aquellos factores del contexto que dificultan o limitan el pleno
acceso a la educación
y a las oportunidades de aprendizaje de los alumnos y alumnas. Según
Tony Booth (2000), las barreras para el aprendizaje y la participación
aparecen en la interacción
del alumno en los diferentes contextos: con las personas, las
políticas, las instituciones, las culturas y las
circunstancias sociales y económicas.”
Desde
la integración
educativa hacia la inclusión,
el uso del
concepto de barreras para el aprendizaje y la participación
es utilizado para identificar los obstáculos
que las y los alumnos encuentran para aprender y participar. De acuerdo con el
modelo social, las barreras aparecen a través
de la interacción
entre los alumnos y sus contextos.
La
educación inclusiva implica procesos para aumentar la
participación
de los estudiantes y la reducción
de su exclusión,
en la cultura, los currículos
y las comunidades de las escuelas locales.
La
definición de Barreras para el aprendizaje y la participación,
se implementa por primera vez en el nuevo modelo de atención
en educación
especial producto de la Reforma Integral de
Educación Básica
en México (RIEB 2006). Al delimitar las barreras de
aprendizaje y la participación
existe cierta concordancia con los retos y compromisos que asume el Sistema
Educativo Nacional en la RIEB, que se enlistan de a acuerdo con las prioridades
y jerarquías
de las siguientes
necesidades:
E
Lograr reducir las
brechas en el acceso a la Educación
Básica y a la capacitación
para el trabajo entre las y los alumnos de los diferentes grupos vulnerables.
E
Atender a la segregación
de estudiantes en los centros
escolares. Esto tiene dos efectos, por una parte impide a las y los alumnos
aprender de experiencias distintas a las propias y, en segundo lugar, significa
que en las escuelas en las que se concentran los estudiantes con iguales
características tienen menor capacidad para reclamar los
derechos educativos de sus hijos.
